Diversos fragmentos de barro, con improntas de cañas y ramajes, pertenecientes a una de las cabañas circulares del poblado descubierto en una de las terrazas del margen izquierdo del río Vinalopó. Esta vivienda se levantó mediante una estructura de postes de madera que sustentaba una cubierta de entramado de troncos, ramas y barro. Las paredes estaban formadas también por un armazón de ramas y barro, del que se ha recuperado numerosos fragmentos. Este tipo de poblados, que suelen ocupar varias hectáreas, se caracteriza por la presencia de estructuras de habitación excavadas en el subsuelo  que fueron utilizadas como hogares, como silos para el almacenaje de las cosechas de cereal, como áreas de abocamiento de residuos, e incluso como lugar de enterramiento.