Salas

TESOROS DE LA ARQUEOLOGÍA RUSA EN EL MARQ

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RUSIA

La tercera sala se inicia con los objetos procedentes de los túmulos de Noin Ula (Mongolia), necrópolis de los antiguos hunos donde se han hallado piezas chinas de los siglos I y II d.C. Desde China al Mediterráneo se desarrolló la Ruta de la Seda, que ya entre los siglos VI y VIII genera una gran riqueza comercial, como muestran los espléndidos frescos pintados en las construcciones de la ciudad sogdiana de Panjakent (Tayikistán) o los vasos persas de plata y oro. Relicarios, cruces e iconos de la ciudad de Quersoneso, en la península de Crimea, remiten al Imperio Bizantino, del que Rusia tomará los pilares de su unificación: la religión ortodoxa y el alfabeto cirílico, en el siglo X; y el águila bicéfala -símbolo de los zares y de la nación rusa-, en el siglo XV.

La muestra incluye aspectos de la vida cotidiana de la Rusia medieval a través de una colección de objetos como adornos de plata, ámbar, juguetes, peines, calzado, sombreros, armas o elementos religiosos y también hace referencia a la importancia de las invasiones mongolas que, entre los siglos XIII y XV, asolaron las ciudades rusas. La victoria de Iván III sobre estos pueblos asiáticos que conformaban la llamada Horda de Oro, favoreció el desarrollo arquitectónico de Moscú, como muestra el pavimento del palacio del que fuera primer Zar, Iván IV, con el que culmina la exposición.